jueves, abril 03, 2008

F(r)OTexTO 7: Bajo presión

Se despertó. Aguantó bajo las sábanas pocos minutos, apenas un cuarto de hora. No había mucho más que pensar. El día, que había imaginado lluvioso, brillaba, aunque ahora, tomada ya la decisión, qué importaba que hubiese nubes o luciese el sol. Preparó café con leche y regó unas tostadas con aceite de oliva. Desayunó; era su comida preferida. Recogió el tostador y colocó el menaje que había utilizado en el lavavajillas. Ya en el baño se desnudó. En el espejo encontró su cuerpo con un aspecto saludable. Lo había pensado demacrado, aunque ahora, tomada ya la decisión, qué importaba que su cuerpo fuese estupendo o enfermizo. Dio la espalda a su imagen y entró en la ducha. Mezcló el agua hasta conseguir una lluvia templada. Cerró los ojos. Imaginó que mansos arroyos de agua recorrían amables la suave geografía de su piel. Sin quererlo se relajó. Se había pensado tenso y nervioso en aquel instante y no era así, pero ahora, tomada ya la decisión, qué importaba su estado. Se secó, demorándose en las humedades más ocultas: su sexo, las axilas. Alcanzó el salón al amparo suave de la toalla. La había pensado con un tacto más áspero, pero llegados a este punto, tomada ya la decisión, qué importaba la aspereza o suavidad del paño. Abrió el cajón de la librería en el que guardaba el costurero. Tomó de él unas tijeras y regresó al baño. Colgó la toalla. Se vio otra vez desnudo ante el espejo. Mirándose a los ojos abrió el grifo del lavabo y dejó correr el agua fría. Después cortó, con las tijeras largas y afiladas, las tuberías de su vida. Dos cortes limpios. El agua entonces se torno tibia y encarnada y sus ojos vidrio. Así fue como los manómetros que daban fe de su existencia se pusieron a cero. Después, alguien -quizá la banca, un amigo, la familia, un amor, uno mismo-, no se sabe quién, decidió volver a colocar aquellos instrumentos en la soleada estantería del escaparate, porque siempre hay quien los compra, quien necesita saber qué presión puede soportar antes de tomar la decisión acertada.

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